Historias de la vida real Tips “Puesto que ya muchos han tratado de poner en orden la historia de las cosas que entre nosotros han sido ciertísimas” (Lucas 1:1) Era interno en un Seminario bíblico, y muchas veces no tenía para comprar libros para hacer las tareas. Como estudiante de la Biblia y discípulo del Señor tenía fé que Dios proveería para los libros, la comida, y otros gastos necesarios, pero tenía que hacer mi parte.Cada uno de nosotros tiene su historia y su testimonio. Por un lado, la historia de nuestros fieles misioneros que nos inculcaron fé en Dios, y un mensaje espiritual y solamente del cielo y poco o nada de nuestra realidad. Por eso en el Seminario aprendí dos cosas: a tener fé y a trabajar.Hay que tener fé en el Señor, no hay duda que su Palabra se cumple, que él suple al que es llamado y al que se dedica a servirle en el Ministerio del servicio a la Iglesia, luego también aprendí que las necesidades básicas no vienen como una lluvia del cielo y hay que trabajar y no ser ocioso.Aprendí a lavar, a limpiar mis cosas personales y a ser bibliotecario y tener una pequeña fuente de ingreso para poder pagar los gastos de la licenciatura. A veces, salíamos de estudiar por las noches y no había que comer y allí aprendimos a ser compañeros solidarios y a servirnos mutuamente.La vida nos enseña que hay un Señor en quien debemos confiar y que Él suple todo lo que necesitamos, pero también aprendemos que debemos ser cristianos creativos y productivos, que trabajamos y que no somos dependientes de agencias para tener becas solamente, sino que buscamos maneras lícitas para tener ingresos y estudiar.Amigo mío, tenga un devocional en dónde tenga tiempo para buscar a Dios y dejar que Él le guíe a conocer mejor al Señor y tenga tiempo para crecer en la fé cada día. ¿Dedica tiempo necesario para orar?En cierta ocasión un Pastor me delegó la tarea de administrar la Iglesia y cuidar su casa, mientras él viajaba al exterior. Fue interesante ayudar en dos áreas, mientras era soltero. Por un lado, la Iglesia, con sus necesidades y una casa ajena, en la que me sucedió lo siguiente.Resulta que un viernes en la tarde retornaba a la casa, al intentar abrir unos muchachos o jóvenes me hicieron entrar a la fuerza, con pistola en mano y me echaron al piso, me quitaron los lentes, me amarraron, mientras que estos individuos hicieron de las suyas, robando todo lo que pudieron y vaciando la casa, y amenazándome si los miraba o intentaba hacer algo.Cuatro jóvenes que aparentemente eran vecinos, no parecían delincuentes, sino que robaban para drogarse o para satisfacer sus placeres, me dejaron amaniatado y sin poder defenderme, tirado en el piso de la sala, mientras ellos salían de la casa con todos los objetos robados y de manera natural.Orando al Señor por mi vida y después para estar desatado, logré abrir la ventana y la puerta y salir a llamar por teléfono al vecino para denunciar a la policía. Aunque hubo un proceso, nunca supimos quienes fueron, lo valioso de esta lección es que Dios es soberano y tiene control de todo.¿Para qué permitió esto el Señor? ¿Algún pecado escondido? Realmente, no lo sé, no necesariamente vienen los sinsabores por pecados, a veces puede ser por el alto costo de la vida, desempleo, de delincuentes que se apoderan de lo ajeno; y una lección de que el Señor nos cuida, a pesar de robos y asaltos.Lucas, habla respecto de las cosas que a él le sucedieron y le testifica a Teófilo y a todos nosotros, de la vida de Jesucristo. A propósito, necesitamos dedicar tiempo a Dios para conocerlo más y poder testificar a nuestros amigos de su amor, poder y protección que Él nos ofrece cada día. ¿Has dedicado tiempo para buscar a Dios? El retorno de la inversión en entrenamiento ejecutivo de equipos gerenciales es exponencial y en minutos. Norman Vincent Peale. Te gustó? Compártelo ! Tweet Whatsapp Anterior Siguiente