web hit counter www.elmayorportaldegerencia.com - Las telecomunicaciones en américa latina
Welcome to www.elmayorportaldegerencia.com   Click to listen highlighted text! Welcome to www.elmayorportaldegerencia.com Powered By GSpeech


La industria de las telecomunicaciones en América Latina ha incurrido en una reestructuración fundamental en la última década. Esta reestructuración no solo se ha reflejado en el cambio de estructura accionaria de los operadores tradicionales, sino también en la entrada de nuevos jugadores, la introducción de nuevos servicios y el desdoblamiento de la cadena de valor. El siguiente artículo provee un análisis de los últimos diez años, así también como un ensayo de prognosis de lo que ocurrirá en el futuro.

TRES FASES DE DESARROLLO DE LA INDUSTRIA

La reestructuración de la industria de telecomunicaciones en América Latina ha atravesado tres fases sucesivas (ver cuadro 1).

En primer lugar, la privatización de los monopolios estatales; en segundo lugar, la liberalización con la consiguiente entrada de nuevos operadores y, finalmente, la consolidación de la industria en una estructura oligopólica. Esta última fase recién a comenzado.

Como bien sabemos, con la excepción de Colombia, la privatización de monopolios estatales siempre precede a la desregulación. Esto se debe a la necesidad del Estado de maximizar el valor de la privatización, mediante el otorgamiento de monopolios temporarios.

¿Cuál ha sido el resultado de cada uno de estas fases? En primer lugar, la privatización ha acelerado la construcción de redes e infraestructura, con el consiguiente beneficio para la población y los sistemas económicos. Por ejemplo, Argentina ha visto su densidad telefónica incrementarse al doble de su producto bruto (ver cuadro 2).

Esta modificación en la relación entre la variable económica y la densidad telefónica que mide la penetración del servicio de telecomunicaciones es lo que denominamos, sin perjuicio peyorativo, la "burbuja de la privatización". Este concepto se basa en el supuesto inicial que la riqueza de una nación determina el nivel de difusión de la tecnología de comunicaciones (tal como se puede ver en la relación entre ambas variables en el cuadro 2). Ahora bien, en términos generales, en situaciones de monopolio estatal la demanda de servicios de telecomunicaciones no puede ser satisfecha en su totalidad. En general, la brecha entre la oferta y la demanda — especialmente en países en vía de desarrollo — es sustancial. En este contexto, la privatización de los operadores facilita el cierre de esta brecha, lo que se puede observar en el crecimiento de la densidad telefónica en Argentina a lo largo de la década del 90.

El estudio de las telecomunicaciones indica que la relación de causalidad "desarrollo económico/telecomunicaciones" también opera en sentido inverso. Esto quiere decir que el aumento de la densidad telefónica ejerce una influencia positiva multiplicadora en el incremento de la productividad del sistema económico. Conviene remarcar, sin embargo, que la "burbuja de la privatización" es un fenómeno temporal (ver cuadro 3).

Las tasas de crecimiento de año en año en Argentina muestran un aumento significativo del mercado de telecomunicaciones en los cinco o seis años que siguen a la privatización, y posteriormente un progresivo alineamiento con la tasa de crecimiento de la economía. Todos los países que privatizan su infraestructura de telecomunicaciones incurren en el mismo fenómeno. Brasil, por ejemplo, se encuentra en medio de esta fase. Es importante remarcar, sin embargo, que como toda burbuja, ésta termina desinflándose. Por consiguiente, preparar un plan de negocios para entrar en estos mercados nunca puede estar basado en tasas de crecimiento de la demanda de 40% ad infinitum. Pero esto es anticiparse en la historia.

La segunda fase de transformación o discontinuidad emerge con la liberalización de la industria. En América Latina, tal como ocurre en otros países, la liberalización tiende a seguir tres modelos diferentes (ver cuadro 4).

El cuadro 4 mide el nivel de apertura de ciertos países latino americanos en función de cuatro niveles. Cada nivel representa un indicador mixto de variables jurídicas, regulatorias, controles tarifarios, y número de licencias. El nivel 1 representa situaciones de monopolio estatal, mientras que el nivel 4 describe contextos de apertura total. De acuerdo a este esquema descriptivo, se puede ver que los países latinoamericanos siguen tres modelos diferentes. En primer lugar, la desregulación agresiva de Chile. En segundo lugar, la desregulación gradual en Argentina, México, El Salvador, Guatemala, Panamá y finalmente, la desregulación tardía en Brasil, Costa Rica y Honduras. En términos generales, y tal como ha sido demostrado en la relación entre privatización y filosofías anti-estatales,[i] los modelos de liberalización coinciden con la orientación ideológica de los diferentes partidos en el poder.

Con la apertura del mercado, y parcialmente incentivados por las tasas de crecimiento de "la burbuja", múltiples operadores entran al mercado. Véase por ejemplo los numerosos operadores que solicitan licencias en diferentes países: 21 para servicios de larga distancia en Chile en 1994, 12 en México 1996, 7 en Argentina en 1999. En Brasil, por ejemplo, existen hoy 18 operadores en servicios de comunicaciones de datos (ver cuadro 5).

El impacto inicial de la entrada de nuevos operadores resulta en estímulo de la demanda. El caso paradigmático de este ejemplo es la industria celular (ver cuadro 6).

Tanto en el caso de Argentina, Brasil, México o Estados Unidos, el quiebre del monopolio o duopolio celular determina la reducción de precios, y el incremento de la intensidad competitiva, aumentando también el nivel de conocimiento por parte del consumidor.

Pero, a mediano plazo los ciclos de crecimiento determinados, primero, por la privatización y, luego, por la liberalización tienden a cerrarse. La razón fundamental de este hecho se encuentra en la estructura de la demanda y la pirámide socio-demográfica de América Latina. Para ilustrar este punto, nos servimos del ejemplo de la penetración residencial del Internet en la región (ver cuadro 7).

La tabla de la izquierda muestra a nivel comparativo, la penetración del Internet en el mercado residencial. Tal como es de esperarse la penetración en América Latina es considerablemente inferior a los Estados Unidos. Sin embargo, cuando examinamos la penetración por segmento socio-demográfico (en los cuadros de la derecha), se puede observar que la penetración en los hogares del segmento A se está acercando a lo que se podría entender como saturación (50%). Por otra parte, mientras que la penetración en el segmento B se está incrementando, la verdadera frontera está en el segmento C — la clase media. La pregunta fundamental es: ¿cómo crecer más allá de los sectores más pudientes? Obviamente, la industria celular ha producido una respuesta a esta pregunta: el prepago. Sin embargo, cuando el prepago asume tasas de penetración superiores al 20% de los abonados, uno se plantea cual es el riesgo en el flujo de caja que este tipo de concentración conlleva.

En este punto, la pregunta nuevamente aparece relevante: ¿existe suficiente espacio en el mercado en América Latina para acomodar un número elevado de operadores? Nosotros pensamos que no. Este supuesto anuncia la entrada a la tercera fase de transformación de las telecomunicaciones latinoamericanas: la consolidación. Los factores impulsores de esta tercera fase son cuatro. En primer lugar, el argumento de la cuota mínima eficiente de mercado. En industrias con un alto costo de capital, la cuota de mercado mínima eficiente es aquella que permite recuperar los costos de inversión a mediano plazo. Si esta cuota no es posible, la viabilidad futura de la empresa es cuestionada, o se reduce la inversión mediante la migración a una estrategia de nicho, o se incrementa la cuota de mercado. Tal es la disyuntiva de hierro. En segundo lugar, y relacionado con el primer factor, es el hecho que existe un número limitado de posiciones de nicho. Por ejemplo, en el terreno de comunicaciones de datos en el sector empresarial, una vez completado el descreme de las grandes cuentas, un número grande de operadores han comenzado a buscar a la pequeña y mediana empresa como el objetivo de la nueva estrategia de nicho. La pregunta deviene: cuánto espacio existe para soportar más de un jugador en este segmento?

En tercer lugar la ola de consolidación en la que estamos entrando está parcialmente determinada por el horizonte de inversión del capital de riesgo. Este siendo entre tres y cinco años, excede en muchos casos el punto de cruce donde una inversión se torna rentable. Debido a esto, pronosticamos que los inversores que vienen del sector de capital de riesgo pueden llegar a retirarse de la industria a corto plazo.

En cuarto lugar, y coincidente con el factor anterior, los grandes operadores necesitan expandirse para generar masa crítica, solidificar su posición en la cadena de valor y desarrollar propuestas para una industria convergente (móvil – fija, medios-telecomunicaciones, voz-datos). Como consecuencia, estos deberán seguir adquiriendo otros operadores.

IMPLICACIONES PARA EL SECTOR

La entrada en está tercera fase plantea, obviamente, una serie de desafíos para los operadores existentes. En primer lugar, la velocidad de innovación que resulta en la rapidez en la introducción de nuevos productos es crítica. En segundo lugar identificamos el imperativo de establecer alianzas estratégicas que resulten en posiciones sólidas en instancias críticas de la cadena de valor de la industria. En tercer lugar, la necesidad de integrar todos los negocios dentro de un modelo único que permita el alcance de sinergías y la paquetización de productos con vistas a un dominio efectivo de segmentos de mercado.

Estos son algunos de los imperativos para responder al desafío de la tercera etapa de transformación de la industria. Aquellos operadores que respondan con éxito a esta nueva etapa serán los dominantes del futuro

Raul L. Katz es Vicepresidente de Booz-Allen&Hamilton, Inc. y dirige el área de Comunicaciones, Medios y Tecnología de la firma asesora mundial. Tiene un Ph.D. en Ciencias Políticas y Administrativas del Massachusetts Institute of Technology, entre otros grados académicos. Es autor del libro “La Sociedad de la Información: una Perspectiva Internacional”. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.


El retorno de la inversión en entrenamiento ejecutivo de equipos gerenciales es exponencial y en minutos. Norman Vincent Peale.
Te gustó? Compártelo !
Pin It

Don't have an account yet? Register Now!

Sign in to your account

Click to listen highlighted text! Powered By GSpeech