Imperio Otomano. Tips Imperios El Imperio Otomano comenzó siendo uno de los pequeños estados turcos que surgieron en Asia Menor durante la decadencia del Imperio Selyúcida. Los turcos-otomanos fueron controlando paulatinamente a los demás estados turcos. En sus manos cayó Bursa en 1326 y Adrianópolis en 1361. Las victorias otomanas en los Balcanes alertaron a Europa sobre el peligro que este imperio representaba y fueron el motivo central de la organización de la Primera Cruzada. El imperio vivió una vertiginosa expansión: venció a Ladislao de Polonia en 1444 y capturó Constantinopla en 1453. De esta forma, los otomanos habían pasado de ser una horda nómada a convertirse en uno de los más extensos y esplendorosos imperios del mundo. Posteriormente tuvo lugar la expansión del imperio hacia Hungría, Valaquia, Moldavia y Transilvania. Parte del secreto de su triunfo residía en la posesión de un poderoso ejército conformado por estrictas jerarquías a las que podían pertenecer cristianos y extranjeros. Su cuerpo de élite estaba conformado por los famosos jenízaros o soldados europeos que habían sido robados desde niños y reeducados en el Islam. El Imperio Otomano también expandió sus fronteras en el norte de África. Cuando estalló la I Guerra Mundial, el Imperio Otomano se alió con Alemania y la Triple Alianza. Después de la derrota de los Imperios Centrales, el Imperio Otomano se desplomó en el desorden. En 1918 la resistencia turca se colapsó tanto en Asia como en Europa, concluyendo con un armisticio y la definitiva caída del Imperio Otomano, disuelto con la firma del Tratado de Sevres. El retorno de la inversión en entrenamiento ejecutivo de equipos gerenciales es exponencial y en minutos. Norman Vincent Peale. Te gustó? Compártelo ! Tweet Whatsapp Anterior Siguiente